Opciones de publicación para autores independientes

En la actualidad hay varias opciones de publicación: libre, autopublicación, coedición y editorial tradicional. Hoy quiero hablarles un poco sobre esto.
Si bien estoy segura de no haber explorado aún todas las posibilidades dentro de cada una de ellas, me he topado con algunas que me resultaron bastante interesantes, sobre todo para aquellos autores que, como yo, no disponen de mucho dinero para invertir en su obra.
Muchos lectores prefieren el formato físico, sin embargo el formato digital tiene beneficios que quizás aún no logramos ver por aferrarnos al romanticismo de tener en nuestras manos aquel precioso objeto de aromas amaderados con un ápice de tinta. Lo cierto es que, si estamos pensando en comercializar nuestras obras, debemos tener en cuenta ambas opciones, y la impresión en físico no siempre es posible por su costo.

En primer lugar, me gustaría hablarles de cuestiones legales, porque también de eso dependerá la elección a la hora de buscar hacer realidad nuestro sueño.
Tenemos dos opciones que se relacionan directamente con el tipo de escritor que seamos:
1: Escribir por gusto y que no nos importen nuestros derechos en absoluto.
2: Ir por el camino de la legalidad para obtener algún beneficio o, en todo caso, que no lo obtenga otro a costa de nuestro trabajo.

Cada país tiene un organismo que se encarga de registrarnos como autores y crear un lazo internacional con nuestras obras. En Argentina, este organismo es la Cámara argentina del libro .
Si bien los derechos de autor se generan al instante de la creación del objeto en cuestión, en este caso el libro, cuento o relato (la obra), siempre es menester tener un apoyo legal por cualquier eventualidad. Este apoyo legal es la propiedad intelectual.
Hace un tiempo atrás les hablé de Safe Creative, quien actúa como "testigo" ante algún problema (puedes leer la entrada AQUÍ). Si pertenecemos al primer grupo, bastará con registrar allí nuestras obras bajo las licencias gratuitas de Creative Commons. Sin embargo, si queremos que nuestra obra esté realmente protegida y tomarnos de forma seria su distribución y nuestro reconocimiento como autores, lo más recomendable es recurrir al organismo correspondiente en nuestro país y obtener la propiedad intelectual.
Cabe aclarar que a través de Safe Creative también se puede obtener la propiedad intelectual completa. Bastará con visitar el sitio y leer hasta la letra pequeñita.


Publicación libre


Si solo quieres ser leído y no te interesan tus derechos ni nada (o simplemente no quieres publicar en físico o digital), tienes varias opciones de publicación. Existen plataformas para escribir libremente que no te exigirán absolutamente nada (bueno sí, quizás algunas te exijan cierta calidad o estén atentas a tu contenido) y en las cuales no hay límite para tu imaginación y creatividad. Tal es el caso de WattpadLitnet (Booknet)InkspiredBookista y otras. También puedes crear tu propio blog (gratis) a través de Blogger (que pertenece a Google), Wix o Wordpress. Este blog, por ejemplo, está hecho en Blogger, y aunque no lo creas no es para nada complicado hacerlo, así que no dejes que el miedo a la tecnología te gane.
Una vez que tus textos estén cargados a la plataforma que hayas elegido (puedes hacerlo en todas si quieres), solo quedará compartir los enlaces a través de tus redes sociales para mostrar lo que haces. Y si algún día cambias de opinión y quieres ganar algo de dinero con tu obra, tienes la opción de la publicidad en tu sitio (a través de AdSense) o abrir una cuenta de PayPal para donaciones, tal como lo he hecho yo.
Cabe aclarar que sitios como Wattpad y Litnet cuentan ya con opciones de pago para obras de mucho éxito y que cumplan con ciertas características, pero también debo advertirte que la piratería es algo que está muy presente en estas plataformas.


Autopublicación


Si perteneces al segundo grupo, el primer paso es ser reconocidos como autores independientes ante el organismo de tu país. En Argentina, por ejemplo, al ser autores independientes podemos registrarnos como "autor-editor". El registro de autor tiene un costo y se hace por única vez.
Luego viene el registro de la obra en sí, que incluirá el ISBN, catalogación, ISBN para versión digital, propiedad intelectual... todo está detallado en la misma página del organismo (CAL). Estos montos no son demasiado elevados, sobre todo por lo útiles e importantes que son para la identidad de nuestra obra y su futuro. Y lo mejor de todo esto, es que los trámites pueden realizarse vía online.


No es obligatorio que un libro cuente con un ISBN para poder imprimirlo, ya que hoy en día existen editoriales independientes e imprentas que pueden encargarse de que nuestro libro se vuelva tangible, incluso imprimiendo solo una unidad para nuestra biblioteca personal. Todo esto, claro está, mientras sigamos por el camino de la autopublicación
Tal es el caso de, por ejemplo, AutoresEditores, que además cuenta con una librería virtual donde podremos comercializar nuestras obras si así lo deseamos, ya que trabajan con la llamada "impresión bajo demanda", un invento maravilloso que nos permite a los autores no invertir en 50 o 100 copias que quizás mueran en nuestro altillo porque no tenemos los suficientes amigos o familiares para que nos los compren por puro compromiso 😄.
Sin embargo, si un libro tiene ISBN la impresión queda libre de impuestos, así que el ISBN no es una mala inversión.
En el caso de Autores Editores, si bien ellos ofrecen el servicio de edición, maquetación y creación de portadas, también nos enseñan a hacerlo por cuenta propia y así evitar gastos que no podemos solventar. Gracias a planillas prediseñadas, videos instructivos y una explicación muy clara, no es para nada imposible realizar por nuestra cuenta todas estas tareas. Pero, en el caso de que hayamos cometido errores, ellos no se responsabilizarán por eso, por supuesto.
Existen otras plataformas de autopublicación más conocidas como Amazon KDP, Lulu, Bubok, Google books y tantas otras. En algunas de ellas, como Amazon, se encargan de ponerle un ISBN a tu libro si no lo tiene, pero recuerda que es IMPRESCINDIBLE que tengas tu propiedad intelectual previamente. No cometas el error de creer que el ISBN o los derechos de autor te protegerán, mucho menos si ese ISBN te lo está otorgando un organismo que no es el oficial. El ISBN no tiene nada que ver con la propiedad intelectual, es simplemente un código de catalogación y comercialización que le pertenece a la obra o, mejor dicho, a la edición de la obra. Y el derecho de autor es tácito, hay que dejar constancia de él de alguna manera (a través de la propiedad intelectual) para que exista de forma tangible. No se puede andar por la vida al grito de "¡eso es mío!" sin tener "un papelito" que lo avale. 
Mi consejo es que entres a cada uno de sus sitios y leas hasta la letra pequeñita, y luego consultes en diferentes grupos en busca de experiencias de colegas. 
También tienes la opción de comercializar tu obra por tu cuenta a través de una tienda virtual, por ejemplo PayHip. Las tiendas virtuales nos permiten cargar nuestra obra y agregar un botón de carrito a nuestros sitios (blogs o páginas) para que el cliente pueda adquirirla. También tienen varias opciones de promociones (como descuentos si compartes el link de compra en tus redes o un descuento del 25% por cada nuevo comprador que consigas), lo cual es ideal a la hora de promocionar nuestra obra.
También, si tienes en tu poder ejemplares en físico, puedes hacer uso de sitios como Mercado Libre.

Imprenta


Puedes ser 100% independiente y encargarte de la corrección, la portada y la maquetación de tu libro tú solo. Sería genial poder contar con una mega impresora en casa para poder prescindir también de eso, pero "el bolsillo no da y el espacio tampoco". Para estos casos (y este es mi caso), contamos con imprentas que ofrecen este servicio. Tal es el caso de Servicop (la imprenta que yo utilizo), que ofrece determinados formatos entre los cuales podemos elegir, con un mínimo de 10 ejemplares. 
Antes de seguir, aclaro que Servicop también brinda servicios editoriales y acaba de abrir, incluso, un espacio especial para sus autores, pero en esta ocasión hablaré de ellos como imprenta.
Si sabes maquetar, hacer portadas y confías en tu autocorrección, puedes consultar los formatos ofrecidos por la imprenta para adaptar tu libro a alguno de ellos y solicitar un presupuesto de impresión por la cantidad de ejemplares que necesites. Esta es la opción más económica dentro de lo que es la autopublicación, ya que, aunque los ejemplares te cuesten un poquito más caros por ser pocos, te ahorras no solo un montón de ejemplares que quizás queden eternamente en una caja bajo la cama sino también el gasto de corrección, maquetación y portada. Claro está que el resultado final depende 100% de tus habilidades y tu compromiso, y si no confías en eso, esta no es la opción correcta para ti.
Hay muchas imprentas que trabajan de esta manera: uno se acerca llevando los archivos y ellos lo imprimen. Pero procura acercarte antes a consultar cuáles son los formatos que ofrecen (tamaños, gramajes, tipo de impresión...) para poder trabajar en tus archivos ya basado en eso. Tendrás que aprender muchas cosas para trabajar de esta manera, pero vale la pena.
 

Coedición


La única forma de publicar que yo conocía (aparte de la tradicional) antes de enterarme de la autopublicación, era la coedición, lo que me hizo pensar que nunca iba a poder tener una obra mía entre mis manos o en la biblioteca de mi pueblo. Si hoy comprar un libro es algo que no todo el mundo puede darse el lujo de hacer, ¿cómo yo voy a imprimir 50? Pero he descubierto que algunas de estas editoriales, que no trabajan con impresión bajo demanda sino con tiradas de cantidades superiores a 50 unidades, nos permiten financiar nuestra inversión. Tal es el caso de Tinta Libre Ediciones, por ejemplo. Entonces, esa también es una buena opción si somos parte del grupo amante de lo físico y si nos gusta la idea de ir por ahí con nuestro libro bajo en brazo a la espera de una buena oportunidad para venderlo, o si tenemos la intención de hacer una presentación, donación o lo que fuera.
Las editoriales de coedición te ofrecen servicios de edición, corrección de estilo, maquetación, diseño de portada, publicidad, presentaciones... todo esto a cambio de su correspondiente costo, por supuesto. Esto no es ilegal ni una estafa (como suelen creer muchos escritores), son servicios para el escritor de parte de gente que tiene experiencia. Que las regalías no te convenzan o que alguna no cumpla con lo pactado, es otro tema.
Sin embargo, te aconsejo realizar varias consultas y buscar tu conveniencia, quizás la ansiedad pueda jugarnos una mala pasada. Hoy en día cualquiera se cuelga un cartel de "Editorial" y te ofrece el mundo en las redes sociales. No dudes en consultar a colegas y en investigar a fondo frente a ofertas de editoriales de coedición, ya que muchas de estas suelen perseguir al escritor a sol y sombra hasta conseguir un contrato, y no les interesa en lo más mínimo la calidad final de tu obra o tu futuro.
De hecho, si ellos son quienes te buscan, DESCONFÍA. No creas que es por tu talento, no te dejes endulzar. El pulido de una obra desde manos del escritor a la librería es un trabajo de meses y muchas de estas editoriales se jactan de publicar decenas de libros por mes... ¿eso no te dice nada?


Editorial tradicional


La tercer opción es la clásica: enviar nuestra obra a una editorial de renombre y esperar a que sea leída y juzgada. Si la editorial cree que puede venderse bien, ella se encargará de la edición, impresión, distribución y venta de los ejemplares que considere necesarios ofreciéndonos regalías por cada venta. De esta manera nuestra inversión es nula... o quizás no, porque podemos estar mucho tiempo esperando una respuesta que tal vez jamás llegue y no sé hasta que punto esa incertidumbre resulta emocionante.
Tampoco sé qué tan presente está el autor en este proceso. Debido a que la editorial trata a la obra como un producto comercial, puede que considere oportunos ciertos cambios en ella para un mejor recibimiento del público objetivo. Si estás dispuesto a esto y no tienes apuro en publicar, puedes estar atento al inicio de recepción de obras de las editoriales tradicionales (muchas de ellas se especializan en géneros o los van rotando según la conveniencia en el mercado).
Claro está, ya no serás un escritor independiente, incluso la coedición te deja un poco en la cuerda floja (aunque tú seas el que ha pagado por todo), pero esta no es una cuestión que deba detenerte a la hora de ver cumplido tu sueño. Son simplemente definiciones y etiquetas, y aquí lo importante es tu obra.


Eso es todo por ahora con respecto a la publicación.
Si tienes información sobre el tema no dudes en dejarla en comentarios, así ayudarás a tus colegas escritores a tomar una decisión con respecto a sus obras. 









5 comentarios:

  1. Muy buena info!! Me interesó mucho el tema de Autores Editores, creo que sería útil para mí en este momento. Si pudiera tener más info de ellos sería genial. Gracias!

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  2. ¡Hola Antonella! Buscá su página, www.autoreseditores.com, está todo muy bien explicado, no tendrás problemas. Y si hay algo que no encontrás o te resulta confuso, podés escribirles un email para consultarles. Son muy atentos. Igual no creo que lo necesites, son muy claros con todo.

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  3. Muchas gracias, Sonia. Interesante y útil entrada

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  4. Muchas gracias, Sonia. Interesante y útil entrada

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